El proyecto de Ley busca garantizar la seguridad del paciente. Está impulsado por la madre de Nicolás Denna, fallecido en 2017 por mala praxis, y por el diputado Fabio Quetglas.
Familiares, amigos y allegados de victimas de mala práxis médica participaron el viernes pasado en la presentación del proyecto de “Ley Nicolás”, o de seguridad del paciente frente a los casos de mala praxis, en el Congreso de la Nación.
Durante la presentación estuvo Gabriela Covelli, presidenta de la Fundación por la Vida y la Salud y creadora de la primera versión del proyecto de Ley que lleva el nombre de su hijo, Nicolás Deanna, que en 2017 y con 24 años murió víctima de mala praxis.
“Por primera vez nos están escuchando, hace tres años que venimos a esta misma plaza y pegamos los carteles de nuestros hijos pero parecería que a nadie le importa. Hoy por primera vez alguien alza la voz por nosotros”, señaló una de las principales impulsaras de la Ley.
En tanto, el diputado impulsor de la normativa, Fabio Quetglas, aseguro: En Argentina ha habido una cantidad importante de eventos adversos, así se llaman técnicamente, que en muchos casos obedecen a cuestiones del sistema sanitario, pero en otros al mal comportamiento de profesionales de la salud que han producido una carga de dolor en familias”.
A su vez, dijo que estas situaciones “han movilizado a la sociedad civil a poner la lupa en el sistema de salud, en donde, así como nos curamos también hay riesgos y le corresponde al Estado minimizarlos a través de todos los instrumentos de los que disponga”.
Los principales puntos de «Ley Nicolás»
El legislador radical por la provincia de Buenos Aires precisó los puntos principales del proyecto presentado en la Cámara Baja:
• La creación de la historia clínica digital, interoperable y encriptada que puede ser consultada en cualquier lugar del país
• Recertificaciones obligatorias y periódicas para los profesionales de la salud
• El desarrollo de protocolos de actuación así como sistemas de auditoría y vigilancia, que disminuyan la posibilidad de daños evitables en las prácticas sanitarias
Asimismo, detalló que el proyecto “cuenta con el apoyo de la Academia Nacional de Medicina y del Observatorio de Seguridad del Paciente” lo que consideró “muy importante” y agregó que: “todo el mundo se está moviendo en materia de seguridad del paciente, es un tema central de agenda sanitaria de todos los países, la OMS lo está impulsando desde el 2019”.
La muerte de Nicolás Deanna por mala praxis
Ocurrió en 2017, cuando Nicolás tenía 24 años. Murió por una meningitis bacteriana tras un diagnóstico médico errado.
El sábado 21 de octubre de ese año fue atendido por el doctor Ricardo Cap por un fuerte dolor de cabeza. El médico le recetó dos analgésicos, pero los malestares no cesaban y dos días después volvió a ver a Cap.
Ese día le diagnosticaron una contractura en la base del cráneo. Pero en realidad lo que tenía y se pudo comprobar más tarde, era una meningitis bacteriana.
El joven fue dado de alta, pero a las pocas horas comenzó a levantar fiebre, realizó un exoftalmos bilateral y lo internaron en la Clínica del Bosque de Pinamar con un suero sin medicación. “Confundió este último síntoma con una alergia, selló así la muerte de mi hijo”, indicó en ese momento su mamá, Gabriela Covelli. El 2 de noviembre, Nicolás finalmente falleció.
Desde entonces, Covelli inició su militancia y conformó la agrupación Familiares y Víctimas de Mala Praxis, que hoy encabeza y está conformada por más de 100 familias, las impulsoras del proyecto de Ley recientemente presentado.
Fuente: telefenoticias