Por Fernando Javier Romero – Comisario General Retirado, Ex Jefe Policía Chaco.
El narcotráfico en Rosario tiene dos aristas, la Política y la netamente operacional de las Fuerzas Seguridad y Policía Santa Fe.
1) Ítem operacional:
Deben saturar la ciudad con Fuerzas Federales y Provinciales, en retenes de controles vehiculares y de motos.
A la par la justicia debe ordenar allanamientos masivos de todos los bunker de ventas.
La AFI (Agencia Federal Investigación Financiera) debe tener abierta causas por lavados activos de los narcos en Rosario, por lo tanto debe trabajar conjunto con la justicia para bloquear esas cuentas.
En forma coordinada deben ocuparse las Fuerzas Armadas para blindar la frontera Norte especialmente y que ingresen cero estupefaciente, hoy los militares están ociosos en los cuarteles.
Prefectura debe inspeccionar barcaza por barcaza que arriba desde Paraguay.
Prohibir totalmente el uso de celulares a los detenidos en todo el país.
Hacer Inteligencia Criminal en las cárceles para recabar información que permita anticipar movimientos narcos y crimen organizado.
Toda esta tarea de prevención debe ser Política de Estado, tarea de todos los días, las 24 horas, NO funciona por periodos cortos.
Si logramos este efecto en lo operacional, le cortas flujo económico y abastecimiento a los narcos.
Ley de derribo de vuelos de tránsito irregular (TAI), no podemos permitir que los narcos ingresen a Soberanía Nacional y solo verlos pasar.
2) ítem Político y creo yo el más significativo:
El Presidente de la Nación, en su carácter de Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas y Seguridad, debe declarar la guerra a la Narcocriminalidad, esa declaración debe ser literal desde lo verbal y operacional, es decir que debe ponerse a la cabeza junto con su Ministro de Seguridad de comandar la tropa en el frente batalla, declarar por Decreto Estado Sitio y toque queda en Rosario y sus alrededores desde las 22 a 06 horas (controles estrictos esos horarios con identificación personas).
Declarar la guerra significa asumir el costo político de hacerlo, porque en todo conflicto habrá muertos de ambos bandos, lamentablemente hoy no queda otra solución que utilizar la fuerza pública y recuperar Soberanía Nacional, hacer prevalecer los derechos de las víctimas y todo el peso de la ley al crimen organizado.
Otro error que se viene apreciando que los sucesivos Gobiernos Nacionales y Provinciales, es que no designan Ministros de Seguridad a profesionales en la materia, como ser Policías, Gendarmes, Prefectos.