Por el Lic. Gustavo Doldan – Defensor del Pueblo de la Ciudad de Resistencia
El 1 de marzo se cumplieron 4 años de la asunción de la primera gestión de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Resistencia, que si bien fue creada hace 22 años, recién en 2018 se formalizó la puesta en funcionamiento de ésta institución novísima en la asistencia y defensa de los derechos difusos, colectivos e individuales de los vecinos de la ciudad.
Desde el inicio se ha mantenido el perfil de trabajo y presencia en terreno, escuchando y respondiendo a las necesidades de los ciudadanos, ya sea por consultas y requerimientos ante instituciones y organismos municipales, así como cuestiones o presentaciones en otros organismos. Se hace hincapié en los valores democráticos, negociaciones alternativas y dialogo, además de la publicidad de las acciones que desarrollamos vía redes sociales, y de mantener al tanto a los vecinos en cuanto al seguimiento operativo de la gestión, por medio de llamadas telefónicas, whatsapp, reuniones o mensajes.
La fuerte convicción democrática en base al dialogo, negociación y resolución de conflictos, ha permitido tratar temas difíciles, pero siempre con respeto y dedicación a la atención del ciudadano. La costumbre de presentar siempre el problema, pero también diferentes alternativas de resolución, a los funcionarios y vecinos, ha allanado el camino de buena relación en un contexto de diplomacia y posibilidad de llegar a un buen resultado para las partes damnificadas.
El trabajo en conjunto, es un pilar fundamental, ya sea con instituciones provinciales, y/o municipales, sin distinción de partidos políticos, por lo que se ha prestado asistencia a las diferentes comisiones de trabajo de los concejales, asistido a reuniones con diputados, audiencias públicas, y comisiones, siempre expresando posturas sin condicionamientos ni intereses subjetivos, oponiéndose cuando correspondía a situaciones injustas y perjudiciales para los ciudadanos, gestionando incluso ante instituciones nacionales para obtener soluciones, siempre en forma respetuosa, exponiendo puntos de vista y soluciones alternativas a distintas propuestas, priorizando el bienestar de la ciudadanía.
En promedio, en estos cuatro años, se ha mantenido un porcentaje de efectividad en la gestión superior al 75%, porque sin importar frio, calor o lluvia, la Defensoría del Pueblo trabajó en terreno, no haciendo distinción de zona, ni de tipos de problemas, yendo a cada barrio, con cada vecino que llamó, o pidió ser visitado, en pandemia, y fuera de ella, ejerciendo las funciones y atribuciones para las que la institución fue creada, sin excusas, ni alegando falta de oficina, presupuesto, o cualquier pretendido justificativo para no desarrollar las actividades.
La violencia, el mal trato y la presión sobre algún tema en particular, no forma parte de la idiosincrasia y costumbre de esta institución, repudiamos cualquier tipo de agresión en post de intereses sectoriales, por lo que abogamos por el consenso dentro de las diferencias, en concordancia con los máximos ideales de Libertad Igualdad y Fraternidad expuestos en nuestra Constitución Nacional, siempre con la ayuda de Dios y de la Virgen María, como fuentes de toda razón, solidaridad, misericordia y justicia.