Así lo confirmó el Procurador General de la Provincia, Jorge Cantero. Además señaló que no habría imputaciones porque no existiría delito. Desde la salud privada reconocen que ante el pedido de familiares del paciente, muchas veces hacen entrega del miembro amputado que luego son trasladados a un cementerio o a un crematorio.
En la mañana del pasado viernes, trabajadores municipales encontraron un miembro inferior izquierdo en un conteiner de basuras ubicado en la parcela 38 del barrio Provincias Unidas. Se trató de una pierna izquierda humana con parte de la rodilla, pierna (fémur y peroné), y el pie con vendas blancas colocadas una bolsa de polietileno roja con una etiqueta con nombre, apellido y la fecha de la amputación. Según señaló Canteros a N9 Federal, la extremidad «había sido amputada a una persona de apellido Cáceres en el Sanatorio Frangioli».
«Amputaron una pierna con personal médico, con protocolos, y se la entregaron al hijo del paciente. Esta persona aparentemente desconocía que en el paquete que le entregaron además de gasa y otros efectos estaba la pierna», explicó el jefe de los fiscales de la provincia y agregó que luego de recibir la bolsa el hijo del paciente la habría arrojado al contenedor.
En cuanto a las posibles medidas judiciales que se adoptarían en este caso, indicó que no cree que haya imputaciones porque no existiría delito, aunque se mostró sorprendido “porque se trata de un residuo patológico, que tiene un protocolo de tratamiento especial y se debe llevar a un lugar específico donde se incineran”.
En cuanto a los protocolos en caso de amputaciones, desde la Salud Privada confiaron a elmiradorchaco.com que previo a una cirugía, el paciente o un familiar, en caso de que el paciente se vea imposibilitado, firma una autorización de disección del miembro y un consentimiento para el caso del retiro del mismo.
En este sentido, las fuentes consultadas aseguraron que cuando el miembro u órgano se extrae de un paciente, el sanatorio está obligado a pagar el servicio de retiro de residuos patológicos para crematorios. En este sentido, reconocieron que “muchas veces y aunque no sea lo que corresponda, se le entrega el miembro amputado a un familiar para que este lo lleve a un cementerio o lo creme ya sea en el hospital Perrando o en un crematorio privado. De esa manera, el centro asistencial se evita el pago del servicio de retiro de residuos patológico”. Además aseguraron que el retiro de dichos residuos tiene un costo por kg. de peso que no se supo precisar.
En el caso del hospital Perrando, luego de la intervención quirúrgica, el miembro amputado es trasladado a la morgue para su conservación en la cámara de frio. Luego de un tiempo prudencial, en el cual se obtiene el informe de anatomía patológica, se lo traslada al horno pirolítico que tiene el nosocomio para su cremación.
Según informaron a la redacción, en Resistencia los únicos que realizan este tipo de cremación son el Hospital Perrando en el sector público y el crematorio Fénix en el privado.
Por su parte, Lidia Miño, directora del Cementerio San Francisco Solano, indicó en contacto con el programa Alerta Urbana que “en el caso de un miembro amputado, el familiar a quien se le entrega esa parte del cuerpo humano, se dirige al cementerio, donde se rellena un formulario y se procede al entierro”. En este sentido recordó que el servicio tiene un costo de $200 pesos por única vez.