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En el barrio Carpincho Macho esta mañana, un grupo de al menos 10 personas debieron esperar bajo la lluvia con la paradoja de tener a un colectivero en su unidad, detenido a escasos metros. Ni la lluvia, el barro o la larga espera a la intemperie pudo despertar una cuota de sensibilidad de parte del trabajador del volante. Una de las pasajeras, volcó su enojo en redes sociales.

Las jornadas con precipitaciones traen sus propios inconvenientes en la ciudad de Resistencia. Este martes no fue la excepción, y  junto con ello una usuaria del transporte público de pasajeros manifestó su bronca por la falta de consideración de un trabajador, quien atinó a ignorar al grupo de usuarios que producto del cambio de recorrido, no contaba con una garita o techo para protegerse un poco de la lluvia, teniendo en cuenta la larga espera que significa la frecuencia.

A través de su cuenta personal en la red Social Facebook, la periodista Tere Carey  expresó su fastidio e impotencia al vivir junto a otros pasajeros las falencias de la línea 2. “Felicidades. Has desbloqueado un NUEVO NIVEL DE TURRO! Así esperamos el colectivo hoy. Bajo la lluvia, con barro, durante 25 minutos. El chofer dentro de la unidad, cerrada, tranquilo revisando el teléfono y desperezándose cada tanto. No pudo abrir la unidad para que las casi 10 personas que esperábamos el oooootro coche (porque el de la foto no salía) pudiéramos esperar, nada de arrimar por lo menos la unidad a la vereda. Un desastre, una basura. Nada entienden de SERVICIO”, relató.

En esta oportunidad se trata de la empresa «1º de Enero» que tiene la concesión de la línea 2, la cual a la vez modificó el recorrido en el barrio Carpincho Macho, ya que no ingresa por el acceso principal y utiliza vías alternativas.

 A la vez Carey contó a este medio  “no tienen frecuencias determinadas, no cumplen horarios de salida (salen 5 minutos antes o después), no tienen paradas fijas. Y el tiempo mínimo de espera 20/25 minutos”.

“Lo de hoy me hizo colapsar porque éramos casi 10 personas bajo la lluvia. Estaba lloviendo, y el chofer no arrimó la unidad, ni ofreció abrir la unidad para para poder esperar dentro”, señaló.

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