Recientemente el Poder Ejecutivo nacional dio a conocer el índice de precios al consumidor que, según sus cálculos, descendió en abril al 8,8 por ciento, siendo la primera vez que se encuentra en un solo dígito desde octubre. Los empresarios del combustibles manifestaron que este índice significó un alivio en los costos fijos de las expendedoras de combustibles. Sin embargo, continúan preocupados por la caída de ventas.
Este nuevo escenario económico provocó un cambio en las circunstancias de la operatoria comercial de las Estaciones de Servicio, que ven en la baja del porcentaje del IPC del INDEC, consecuencias “levemente esperanzadoras” para el sostenimiento de sus negocios.
“Una de cal y otra de arena”, reza el dicho popular que en este caso asume la visión de la Cámara de Estaciones de Servicio de San Luis, que a través de su presidente José Gianello, informó que “el descenso inflacionario se reflejó en nuestros costos fijos”.
Con ese concepto, el dirigente estacionero detalló que “las facturas de servicios públicos en nuestra provincia tuvieron una actualización en enero, pero luego se mantuvieron en el mismo nivel”. Además, destacó que las bajas en los insumos se notan en las listas de los proveedores.
En ese contexto, el expendedor aseguró que “la situación nos abre la posibilidad de negociar un mejor valor”. Recalcó que es una práctica que desde hace muchos años era imposible de realizar.
Sin embargo, advirtió que “este fenómeno resulta insuficiente para equilibrar la balanza de sustento de la contabilidad en una Estación de Servicio que promedia los 250 mil litros mensuales”.
Por último, consideró que “la pata que falta para el punto de equilibrio tiene que ver con la recuperación del volumen de despacho de combustibles”. Según los análisis de la entidad cuyana, los porcentajes de derrumbe son mayores a los oficiales de la Secretaría de Energía: “Estamos en un nivel de ventas 40 por ciento por debajo del mismo mes del año pasado”, lamentó Gianello.
Fuente: surtidores.com.ar