La Casa Garrahan Chaco «Casa de la Madre y el Niño», que abrió sus puertas el pasado 29 de julio, tiene su propia huerta orgánica. Así lo hizo saber Carlos Alabe, quién apeló a la colaboración y asesoramientos de los conocedores del tema y enumeró los una serie de objetivos de esta actividad, entre la que se destaca que los niños cuenten con una alimentación sana.
El edificio, ubicado calle Giachino 1708 de Resistencia, desde fines de julio trabaja en la atención personalizada de los niños paciente ambulatorios sin recursos derivados del hospital «Dr. Avelino Castelan» que transitan una enfermedad de alta complejidad.
Como parte de las acciones de albergar, acompañar, educar y contener a los niños con enfermedades de alta complejidad, la Casa Garrahan Chaco está haciendo su propia huerta orgánica. Así lo informó mediante sus redes sociales el titular de la Fundación Ciudad Limpia, Carlos Alabe. “Como somos nuevos en esto, pedimos ayuda y asesoramiento a quienes quieran y puedan colaborar con este proyecto”, solicitó.
Alabe señaló que la “huertitita orgánica” tiene cinco objetivos:
1 – Que los niños coman sano, evitando los conservantes y aditivos.
2 – Que las mamás aprendan a cultivar y puedan llevar a sus hogares el hábito de tener una huerta orgánica para el consumo familiar.
3 – Poder ahorrar en la compra de verduras para la Casa.
4 – Que las mamás, junto a sus hijos, tengan una actividad que hacer unidos y en familia.
5 – Y que tanto las madres como los niños valoren y cuiden el trabajo que todos como comunidad hacemos para su bienestar.